Escena 1: Imagínate que un día sales de tu casa, dispuesto a disfrutar un paseo. Llegas a un restaurante, a una dulcería, a una nevería o a una cafetería; te sientas y pides tu platillo o postre favorito.

De pronto, metes la mano a la bolsa del pantalón para sacar tu cartera y pagar, pero ¡oh, cielos! Tu cartera se quedó en casa, junto con las 10 tarjetas de crédito y de fidelidad de todos los negocios que acostumbras visitar. Es decir, ¡no tienes forma de pagar!

A pesar de que visitas frecuentemente ese establecimiento y te conocen a la perfección, no hay forma de saldar la cuenta.

Escena 2: Sales de tu casa; decides dejar tu cartera y tarjetas guardadas. Llegas al restaurante que más te gusta y pides tu platillo favorito. Terminas el banquete con un exquisito postre y un café.

Al finalizar, te levantas, colocas tu dedo índice en un lector de huellas digitales y ¡sorpresa! Tu cuenta quedó pagada y además el postre y el café fueron gratis.

Evitar situaciones como la escena 1 y generar más momentos como la escena 2 es el objetivo de Digital Cash, un proyecto desarrollado por estudiantes del ITAM e impulsado por Ingressio, una firma de tecnología biométrica fundada por iniciativa de Humberto López Gallegos, pionero en México en el manejo de esta tecnología.

Digital Cash se encuentra en fase Beta y su objetivo es que cualquier negocio, sin importar el tamaño, pueda beneficiarse de planes de prepago y de los programas de fidelización.

Aunque en su origen estuvo enfocado solo a programas de prepago, ahora también es utilizado para administrar los programas de fidelización.

“Lo que hemos visto es que el mercado está buscando más la parte de fidelidad, por ejemplo: al quinto consumo con tus puntos te regalo un corte de cabello –hablando de una estética- y puede sumar por ‘lana’ o por visitas, depende cómo configuras tus promociones; cómo quieres premiar a tu cliente”, explica Humberto.

Pero el camino no ha sido tan fácil como parece. En 2008, Ingressio ya había intentado un proyecto de fidelización con esta tecnología a través de kioscos, donde las personas podían acudir a redimir los puntos adquiridos en establecimientos que aceptaron adoptar el concepto. El nombre de aquel primer intento se llamó Never Card.

Se instalaron kioscos en la Ciudad de México y Acapulco, Guerrero, pero en esos años el internet no contaba con la infraestructura de banda ancha adecuada para el funcionamiento óptimo del sistema, la conexión se caía constantemente y no progresó.

“Como la idea era que fuera global, no podías redimir puntos. Entonces no fue un problema del negocio, no fue un problema del producto, fue un problema de infraestructura. No había internet con ancho de banda, con disponibilidad del 100%, como hoy que tienes en tu teléfono… entonces nos quedamos un poco con ese aprendizaje”, agrega el emprendedor a manera de recuerdo de aquel primer intento.

A pesar del tropiezo, este joven ingeniero egresado de ITAM insistió en impulsar la tecnología biométrica en México. Actualmente, Humberto es Presidente de la Asociación Mexicana de Biometría e Identidad y con Ingressio trabaja para promover el uso de la identificación biométrica en beneficio de las empresas.  Aunque su principal uso es para administrar la asistencia y puntualidad del personal en las empresas, Humberto explora constante de nuevos campos donde aplicar esta tecnología.

Desde 2013, es integrante del Consejo Consultivo de Centro ITAM de Creatividad, Innovación y Emprendimiento, en donde conoce el proyecto Digital Cash y decide apoyarlo como una continuación de Never Card.

Bajo el pensamiento de que no existe cliente que no quiera un beneficio –ya sea en dinero o en producto-, Digital Cash busca aprovechar la única forma de identificación y de pago que no se te olvida en casa, que no se puede falsificar y que puedes usar en cualquier momento: la huella digital.

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