Las nuevas casas en Reino Unido, tendrán incluido una estación de carga EV

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Construir un nuevo hogar en el Reino Unido pronto podría requerir también de una nueva tecnología para automóviles. Esta semana, el gobierno del Reino Unido dio a conocer un nuevo plan para crear un futuro más respetuoso con el medio ambiente y convertir a la nación en “el mejor lugar del mundo para construir y poseer un vehículo eléctrico”. La palabra clave aquí es “estaciones de carga”: las nuevas casas necesitarán tener puntos de carga, las cuales con suerte crearían una “expansión masiva de la red de plug-ins“, señaló el gobierno británico en un comunicado.

Estas ambiciosas iniciativas se basan en un plan previamente definido para acabar con la comercialización de automóviles “tradicionales” (que queman combustibles fósiles) para el año 2040. Como dijo Chris Grayling, Secretario de Estado de Transportes, “lo siguiente será transformador para nuestra industria del automóvil, para nuestra infraestructura nacional y para la forma en que viajamos. Esperamos ver más cambios en el sector del transporte en los próximos 10 años que en todo el siglo pasado”.

Bajo esta nueva propuesta, el gobierno evaluaría si las casas nuevas (o las oficinas) necesitarían estaciones de carga, y también instalaría puntos de recarga en lugares estratégicos de todo el Reino Unido. Además, el gobierno planea invertir más dinero en la infraestructura de carga general, colocando puntos de carga en las carreteras y grandes estaciones de servicio.

Si bien todo esto suena a algo de “gran alcance”, el Reino Unido se ha comprometido a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 80 por ciento (en comparación con los niveles de 1990) para 2050. Y una parte clave de eso, por supuesto, sería para reemplazar muchos de los vehículos que consumen gasolina por otros eléctricos más ecológicos. Sin embargo, dado que los autos eléctricos actualmente tienen un rango de autonomía de unas 250 millas, la adición de estaciones de carga sería clave.

Por supuesto, el Reino Unido también ganará desde el punto de vista económico, si logra reducir las emisiones. Como dijo Grayling, “el premio no es solo un medio ambiente más limpio y saludable, sino para la economía del Reino Unido en el futuro, con la posibilidad de ganar una porción sustancial de un mercado estimado en hasta $10 billones para 2050”.